La nueva ola de los parques de baterías ha causado auténtico furor en Asturias, al convertirse en una de las regiones de España pioneras en usar este modelo más sostenible y responsable con el medioambiente. Su repercusión ha sido tal que, actualmente, el Principado ha impulsado un total de 70 proyectos por toda la comunidad. Esto ha ocasionado un sinfín de debates entre los ciudadanos a los que les surgen numerosas dudas acerca del impacto y de las verdaderas consecuencias que supondría la implantación de estos novedosos sistemas. Gran parte de las polémicas surgen a partir de la ubicación cercana de estos parques a viviendas residenciales, entornos rurales, etc.
Otra de las cuestiones que se plantean está relacionada con el motivo de la irrupción de esta nueva forma que han adoptado los parques. Muchos justifican el nacimiento de estos parques a raíz de la desaparición progresiva de las centrales térmicas de carbón o el trabajo en las minas, donde se extraía y quemaba este material.
¿Qué son los parques de baterías?
Ahora bien, ¿en qué consisten exactamente estos populares parques de baterías? Se trata de un método de almacenamiento de energía en el que las baterías reciben electricidad, en forma de corriente, mediante fuentes de energía renovable o de las centrales para, a continuación, transformarla y liberarla. De esta manera, los parques de baterías sirven para depositar formas de energía que serán utilizadas con posterioridad.
En principio, este sistema sería muy útil para optimizar y aprovechar al máximo las diferentes fuentes de energía, en el que haya un uso más responsable de su suministro y destino. Si bien es cierto que hay cierto vínculo de estos parques de baterías a las centrales térmicas, los promotores y, en concreto, la Consejería de Ordenación de Territorio de Asturias y el equipo de la Fundación Asturiana de la Energía señalan que a través de este nuevo sistema la generación de energía se lleva a cabo de una forma mucho más controlada, además de aumentar la cantidad de energía proporcionada las fuentes renovables.
Por otro lado, los promotores de estos parques dejan claro que existe un mayor soporte a la red cuando existe una demanda en el suministro de electricidad. Por ello, este método parece evidenciar que las ventajas de la implantación de este nuevo sistema son múltiples.
Según los recientes informes de la Consejería, la elevada presencia de estos parques a futuro a nivel regional y nacional se debe al gran consumo que realizan las empresas electrointensivas, debido a la existencia pasada de numerosas centrales térmicas. Debido al cierre de la mayor parte de este tipo de centrales en Asturias, surgirían una especie de vacíos térmicos, que podrían ser aprovechados por el Principado para exportar a otros países del extranjero en el futuro.
El rechazo vecinal, uno de los principales frenos de los parques de baterías
Como se ha mencionado con anterioridad la ubicación geográfica de estos parques de baterías ha suscitado numerosas controversias entre la población asturiana. Han surgido diversas protestas vecinales que solicitan la ubicación de estos parques en las zonas industriales que han dejado inutilizadas las infraestructuras mineras como los pozos de Hunosa además de garantizar que su instalación se realizará siempre fuera de núcleos rurales, sin que esta actividad afecte a zonas de pastos o montes autóctonos ni a la vida de los vecinos. Por ello, gran parte de las asociaciones de vecinos dejan claro que su crítica no va dirigida a la implantación de estos sistemas, sino a su relativa proximidad a los núcleos residenciales por diversos motivos. Uno de ellos es el ruido que estos parques generan, otro es el peligro de incendio de estas baterías de litio que no pueden tratarse como se haría cualquier otro fuego y, también, el perjuicio que puede tener para el valor de sus terrenos o pueblos la instalación de estas centrales energéticas.
Desde el departamento de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, confirman que habrá una distancia de seguridad mínima entre las instalaciones y los núcleos urbanos y zonas forestales. De esta forma, se garantizará la protección de los habitantes y la preservación de las masas forestales cercanas. Otro de los requisitos indicados por la Consejería en el cumplimiento de la implantación de estos sistemas de baterías es que se lleven a cabo sobre suelo industrial. También es necesario que estos parques de baterías se sitúen cerca de subestaciones o de líneas de evacuación a la que conectarse de más de 22.000 voltios.
¿Cuáles son los parques de batería que se encuentran en tramitación actualmente en Asturias?
Cabe destacar que estos varían desde menor cantidad de contenedores hasta los que tienen más de 200.
Los concejos asturianos que podrían albergar en el futuro estos métodos de optimización energética son Salas, Salime, Mieres, Cangas de Onís, Corvera, Colunga, Soto Ribera o Regueras. Además, en algunos de los concejos hay planeado instalar más de un parque como es el caso de Siero, Villaviciosa o Candamo que podrían contar con cuatro, Piloña y Gozón con 3, Llanera, Avilés y Gijón, con 2 y el concejo con mayor número de parques será Oviedo, donde existe el plan de instalar un total de 10 parques de baterías.
