Álvaro Queipo es el más joven de los varones nacionales del PP, el próximo mes de mayo cumplirá 36 años, «muchas veces te ven como a un “chaval” y no te hacen caso, incluso compañeros de partido», apunta en conversación con EL FIELATO, en Cangas de Onís, donde el pasado domingo participó en la carrera solidaria Galbán.
A Queipo le encantaría dejarse caer por Cangas de Onís más a menudo, «vengo cuando encuentro un hueco libre en mis responsabilidades, primero porque aquí viven mis abuelos maternos y segundo porque esta zona es una joya, me encanta», asegura abrazado a Maruja González y José Luis Somoano, “Paxa”, uno de los más reconocidos y veteranos ribereños del Sella.
– Hoy va a correr junto con el alcalde cangués en la Carrera Galbán. Sabe que a Pepín lo de correr se le da bien.
– Por eso decidí venir, porque quería enfrentarme al alcalde más en forma que tenemos en Asturias (sonríe). Es broma, ya le he dicho a Pepín que yo vengo a completar el recorrido caminando, que no se vaya a lanzar...
– ¿Viene a Cangas de Onís menos de lo que venía?
– Pasé aquí la Nochebuena con mis abuelos, pero es cierto que mi vida ha cambiado desde que alcancé más responsabilidades en el Partido Popular. Tengo mucho menos tiempo para mí.
En Asturias tenemos que poner en marcha el modelo que Moreno Bonilla ha puesto en Andalucía. Ahí están los resultados
– Algo que ya sabía, sarna con gusto...
– Evidentemente la vida pública es lo que tiene. Ahora me reconocen por la calle, estoy en una terraza tomando una sidra y se acercan, me inquieren o me preguntan, y es algo que no me molesta, siempre y cuando todo se haga en un cauce de educación y buenos modales. Yo entiendo la política así, cercana, porque es muy importante no desconectar de la calle. Y sé muy bien lo que es vivir en las alas de Asturias porque yo, aunque vivo en Oviedo, tengo una mitad en Cangas de Onís, en el Oriente, y otra mitad en Cangas del Narcea, en el Occidente. Aquí tengo a mis abuelos maternos y de allí son mis abuelos paternos. Viajé mucho de niño entre las dos Cangas. Aquí pasaba temporadas en verano, me encantaba y me sigue encantando, por eso creo que entiendo la idiosincrasia de eso que denominan las alas de Asturias, algo que es difícil de meter en la cabeza a los políticos “de Oviedo”.
– Estas semanas pasadas el PP se sumó a las manifestaciones de los ganaderos, dicen en el PSOE que ustedes se apuntan a un bombardeo...
– Estamos donde tenemos que estar. Lo triste es que el Gobierno de Barbón está desconectado de la realidad y con lo que están sufriendo los ganaderos, lo vemos claramente, no hay empatía alguna, dan palos de ciego, como están haciendo con todo, ahí está el enorme problema de las ITV... A Barbón ya no le apetece ser presidente, se deja llevar por la inercia.
La reunión con el alcalde de Siero fue cordial y confío poder reunirme con más alcaldes del PSOE, aunque me consta que los han llamado a capítulo...
– ¿Cómo se solucionan los problemas de la ganadería y la agricultura?
– Mire, en Asturias tuvimos durante cuatro años un Comisionado para el Reto Demográfico que no sirvió para nada. Esa figura ya no existe en el actual Gobierno. Lo primero que hay que hacer cuando se habla de reto demográfico es sacar al lobo del Lespre, es lo que hará el PP cuando llegue al Gobierno, aunque de momento en el Congreso de los Diputados se va a debatir y votar una Proposición de Ley, que eleva el Partido Popular, para sacarlo de la lista de especies protegidas porque el lobo no está en extinción. Y una vez se cumpla con eso, el Principado debe de poner en marcha el Plan de Control del Lobo y hacer que se cumpla. Pero hay más ¿sabe cuál es la media de días que pasan hasta que los ganaderos cobran los daños causados por el lobo? Se lo voy a decir: 337 días, eso es injustificable. Y también es imprescindible que en Bruselas cambien las cosas, que no se legisle capa sobre capa como se viene haciendo, hay que tener en cuenta la especificidad de nuestros ganaderos y agricultores.
– Cuando lean esto conservacionistas y animalistas...
– Mire, yo respeto sus ideas, aunque no las comparta. Pero me gustaría que un animalista viviese la misma experiencia que vive un ganadero cuando sale de casa por la mañana y se encuentran un potro o un xatu devorado por los lobos, a veces aún con vida... Los ganaderos tratan a los animales con el máximo respeto, algo que parece que no entienden muchos que viven en la ciudad.
- Decía antes que a Barbón ya no le apetece ser presidente, ¿lo cree de verdad?
– Claro que sí. Lo mismo que creo que, por higiene democrática, Asturias necesita un cambio y en eso es en lo que nos hemos puesto a trabajar desde el PP, para dar a los asturianos las respuestas que piden después de sucesivos gobiernos socialistas.
– ¿Tiene claro por donde empezaría si alcanzase la Presidencia del Principado?
– Clarísimo. Aquí tenemos que poner en marcha el modelo que Bonilla puso en marcha en Andalucía. ¿Recuerda cuando llegó? Andalucia, el feudo del PSOE por antonomasia, pues ahí está haciendo políticas que han puesto a la región en una posición que no conocía. Eso es lo que queremos hacer aquí.
– ¿Y esa novedad de reunirse con los acaldes, sean del color político que sean? Más de algún mandamás del PSOE asturiano debió de fibrilar al verle abranzando a Cepi, el alcalde de Siero.
– No lo dude. Pero yo creo que tendría que ser algo normal que yo me reúna con un alcalde de un municipio donde muchos vecinos depositaron su confianza en el PP y, aunque no gobernemos, tenemos una responsabilidad con ellos. La reunión con el alcalde de Siero fue cordial y confío poder reunirme con más alcaldes del PSOE, aunque me consta que los han llamado a capítulo... El pasado viernes me reuní con Riestra, el alcalde llanisco, de Vecinos x Llanes, hay que dar normalidad a este tipo de reuniones.
Álvaro Queipo disfrutó de la jornada dominical en Cangas aunque el día no empezó bien del todo porque, de camino a la primera capital del reino, un pinchazo le dejó “tirado” en Sevares. Los políticos, como los ricos, “también lloran”.
