Un árbol derriba la barandilla del puente de Celorio, historia que se repite en Cangas de Onís

Aspecto del puente que da acceso a Celorio, en Cangas de Onís, tras la caída del árbol.
No es la primera vez que sucede durante el transcurso de un temporal

Arrancada de cuajo. Así ha quedado uno de los tramos de la barandilla del puente que da acceso a la localidad de Celorio, en Cangas de Onís. Un suceso consecuencia del temporal de los pasados días en el que las rachas de viento provocaron la caída de un árbol que fue a dar contra la estructura metálica del puente, provocando serios daños en ambos laterales.

El episodio no es aislado ya que la caída de árboles es una máxima habitual en este tramo del río en el que discurre de forma paralela el acceso a la localidad. «La mitad de los árboles están a punto de caer, no hay más que ver que buena parte de ellos están entornados», contaba a EL FIELATO un vecino de Celorio, «así que en cuanto viene un temporal o crece el río, nos encontramos con problemas como este». «Hace dos años la caída de uno de estos árboles nos hizo amanecer sin luz en pleno invierno con lo que eso supone», continuaba, «hasta el momento hemos tenido suerte y ninguno de los árboles ha caído encima de alguien causando daños personales, pero cada vez que llueve fuerte nos echamos a temblar a ver qué va a pasar esta vez».

Tampoco están muy conformes los vecinos con la gestión que Confederación está haciendo de las márgenes del Güeña. «La verdad es que, sabiendo que esto pasa de forma regular, no comprendemos por qué Confederación no toma cartas en el asunto», declaraba el mismo vecino, «supongo que hasta que un árbol no caiga encima de alguien no lo hará y, entonces, será tarde para lamentarse».