El viernes se daba prácticamente por concluida la primera fase de las obras de rehabilitación y adecuación acometidas por el Ayuntamiento de Piloña en el antiguo Instituto de San Cipriano, acometidas por el Taller de Empleo que arrancaba hace un año y concluía esta semana, en el que han trabajado 12 alumnos, un monitor y una mentora.
En esta primera fase se acometió la rehabilitación de la zona de los gimnasios, tanto interior como exteriormente, habilitando allí un bulder, unos vestuarios y la sede del Grupo de Montaña Vízcares. «San Cipriano volverá a tener vida y actividad, el objetivo principal que siempre tuvimos en mente» aseguró el alcalde de Piloña Iván Allende.
En esta primera fase se han invertido los 300.000 euros con los que el Principado financió el Taller de Empleo, además de 75.000 euros en materiales y demás que sufragó el Ayuntamiento.
Lo siguiente que verá la luz en San Cipriano será una bolera asturiana, cuyas obras ya han comenzado en el exterior del edificio y de cara al 2024 el Ayuntamiento dispondrá de 1,5 millones de euros, procedentes de los Fondos Europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia para continuar con la recuperación del edificio, además «solicitamos otro Taller de Empleo para continuar la rehabilitación del complejo», abundó el alcalde.
Entre las obras llevadas a cabo están también la instalación de cámaras de videovigilancia por estar el edificio en una zona apartada de Infiesto.
