El Ecce-Homo de Noreña, sacado en procesión cubierto con plásticos para dar esquinazo a la lluvia

La imagen estuvo a punto de no salir debido a la climatología
ecce-homo-norena-santo
photo_camera La lluvia obligó a cubrir por completo la imagen del Ecce-Homo de Noreña.

La procesión de hoy del Ecce-Homo en Noreña no solo está siendo pasada por agua sino que, además, ha dado lugar a dos circunstancias absolutamente extraordinarias. Y es que en la historia más reciente, aquella que recuerdan los feligreses más mayores congregados en torno a la imagen, nunca antes se había dudado si sacar al santo en procesión pero tampoco se había hecho completamente cubierto de plásticos para resguardarlo de la lluvia. 

La Cofradía del Ecce-Homo lo tenía todo listo para realizar la procesión cuando, unos minutos antes de las 21:00 y con motivo del comienzo de la lluvia, se planteó la posibilidad de no iniciarla. Durante unos minutos que resultaron demasiado largos, el rumor de que el párroco de Noreña, Don Pedro Tardón, y responsable último de la imagen sagrada podía tomar la decisión de no sacar al santo en procesión comenzaron a cobrar fuerza. Fuera y a pesar de la incertidumbre tanto creyentes como vecinos y peregrinos encendieron sus clásicas velas mientras aguardaban aunque ninguno podía disimular la tristeza. «El santo solo dejó de salir en la pandemia», aseguraban unas vecinas visiblemente afectadas, «jamás se canceló la procesión por la lluvia». 

ecce-homo-norena-lluvia
El Ecce-Homo, completamente cubierto para protegerlo durante la procesión.

Las dudas se disiparon cuando se decidió continuar con la celebración pero de una forma excepcional: cubriendo por completo la imagen con un plástico para proteger de la lluvia a una talla tan antigua como delicada. Algo que, hasta donde alcanzan las memorias de los presentes, nunca se había hecho con anterioridad y que no importó a las más de 2.000 personas congregadas para acompañar en el camino al santo. 

ecce-homo-norena-procesion
Los 2.000 devotos allí congregados siguieron la imagen del santo en procesión.

Si finalmente la procesión se hubiera cancelado, habría supuesto la primera vez en la historia de Noreña que se hubiera tomado esta decisión por motivos climatológicos.

Más en El Nora