SOCIEDAD

Pícnic reivindicativo en Noreña en defensa del servicio de comedor en el Colegio Público

Los padres piden que haya dos turnos de comedor para poder cubrir toda la demanda.

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Comedor Escolar en Noreña

La Asociación de Madres y Padres (AMPA) del Colegio Público Condado de Noreña organiza, el miércoles 26 de abril, un pícnic reivindicativo en el patio del Centro a partir de las 14.30 horas.

Se trata de una actividad con la que las familias de los alumnos del Colegio reivindican el derecho al servicio de comedor. Este es el objetivo que se persigue desde el colectivo de padres para el próximo curso.

La  AMPA lucha «por un doble turno que de cabida a la demanda actual. Este curso 208 alumnos son usuarios de este servicio y nos consta que podría haber más interesados».

La asociación  toma esta medida tras recibir, hace unos días, «un comunicado a través del servicio de dirección del Centro en el que se nos asegura que no habrá un segundo de comedor».

En este escrito se explica como, de acuerdo a la normativa vigente en materia de prevención de riesgos laborales, las plazas disponibles para el próximo curso serán 150 que se cubrirán por alumnos transportados, servicios sociales y niños/as con necesidades educativas especiales que requieran este servicio, las plazas vacantes serán cubiertas por orden de solicitud.

«Lo que viene a decir que para conseguir una plaza las familias vamos a tener que dormir a las puertas del Centro», señalan desde la AMPA, y se pregunta que si es esta una medida de conciliación familiar y profesional del siglo XXI. Las familias consideran que están solicitando  algo que realmente les corresponde.

Hace unos meses, desde el servicio de Inspección Educativa, «se nos confirmó que un doble turno sería valorable si el Ayuntamiento aportaba un conserje u ordenanza y se incorporaba un auxiliar administrativo al centro». La AMPA asegura que ambos están prácticamente asegurados de cara al próximo curso escolar.

El pícnic reivindicativo se completa con otra medida, la recogida de firmas entre los vecinos de la villa. En el enunciado se hace hincapié en que el servicio se presta a 208 niños y no llega a cubrir la demanda de las familias al querer reducir las plazas a 150.