BORJA

Carta al nuevo Presidente de la Federación Asturiana de Automovilismo

Y desde esta nueva responsabilidad tendrás que conseguir lo más difícil...

Estimado señor Presidente de la cosa de los automóviles en Asturias, que será nombrado por cuestiones de estatutos y demás pamplinas morenas, el día 28 del corriente. Estimado hijo:

Lo primero, mi más cordial y sincera enhorabuena. Llegas al punto más alto de Asturias en el automovilismo deportivo. Sé que no es fácil llegar ahí, y barrunto que más complicado será ser un Presidente de todos los deportistas del automovilismo en Asturias. Y cuando digo todos, comienzo por los Karts, que en nada te son ajenos; por las carreras en circuitos; auto-cross; subidas que tampoco te son desconocidas; rallyes, tu gran pasión y todo aquello que huela a gasolina. Y hasta a electricidad y bajo consumo, que también hay pruebas para ellos. Como uno ya peina muchas canas, no te olvides de los históricos y los clásicos, cuyas competiciones atraen a más y más aficionados que quieren ver Rallyes como los que yo veía cuando tenía tu edad ahora. Creo que tienes un gran equipo que, bajo tu batuta estará ahí no para aplaudirte, no, para decirte en dónde se puede mejorar. Los palmeros valen para los mediocres.

Estoy convencido que lo harás bien, porque casi te apasiona tanto el deporte de los coches como a mi. Cierto, tu tienes la ventaja de hasta haber llegado a organizar un Rallye que pasa por tu pueblo. Empezaste con un humilde Rallysprint en Cangas de Onís. Luego hiciste un Rallye, y ahora lo haces en toda la Comarca de los Picos. Mucha gente me dice que te salen muy bien y se que hacer un Rallye no es nada fácil.   Conseguir patrocinadores en estos tiempos es cosa de gentes de valía. Y yo se que tu la tienes.
Gobernar durante un día a cerca de 200 personas; una decena de coches de la organización; esos que llamábamos el tiruriru, el triple 0, el cero y otros; Guardia civil; ambulancias y mil cosas más, no es tarea sencilla.

Pero ahora y, desde la responsabilidad que asumes con un apoyo casi unánime de los deportistas y organizaciones del automovilismo de Asturias, no tendrás que organizar solo tu querido Rallye. Ahora tendrás fines de semana, con un Rallye, una subida en cuesta, una carrera de Karting, una carrera de regularidad y rizando el rizo, una de autocross. Y tu obligación es estar en todas, animando a las organizaciones y participantes. Tendrás que tener el don de la ubicuidad. Don ­dicho sea de paso­ de difícil consecución.

Y desde esta nueva responsabilidad tendrás que conseguir lo más difícil: patrocinadores y perras para todas las organizaciones; hacer unos rallyes como los de antes, por el día y la noche, con lo cual los deportistas no tendrán que dejar de trabajar el viernes para correr el sábado, sino que pueden llegar a verificar el sábado por la mañana. Y por la tarde, junto con la noche del sábado al domingo, correr. A los aficionados les gusta ver las faradas, los frenos al rojo y, porqué no, tomar unos cubatas mientras esperan la siguiente pasada. Instaurar una copa para que puedan correr los que menos tienen. Para los que tienen manos y no mucho dinero. Tratar de abaratar los costes de los seguros y las inscripciones. Volver a dar premios en metálico en todas las pruebas y mil cosas complicadas y nada fáciles. Siempre digo: lo fácil lo hace cualquiera, lo difícil es más divertido.

Pues a divertirte y conseguir muchas cosas difíciles, sin olvidarte de tus hijas, que son mis nietas. Esto de la gasolina te hace olvidarte hasta que existen. A mi me pasó y no creas que estoy tan contento.

Celebramos esta semana los XXV años de EL FIELATO, un proyecto al que te sumaste cuando tenías 16 años. Si ese asunto me presta, no veas como me presta poder tener un hijo Presidente de la Federación Asturiana de Automovilismo.
Asumes una gran responsabilidad y sé que tienes capacidad para poderlo hacer muy bien. Pues como el movimiento se demuestra andando, a andar y sin descanso. Te deseo lo mejor, porque ello será lo mejor para mi deporte del motor. Y qué redemonios: estoy muy orgulloso de ti.

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