Pa cuando ustedes lean estas líneas a lo mejor ya hay gobiernu, o a lo mejor ya convocaron elecciones otra vez, o a lo mejor Puigdemont ya es vicepresidente de la nueva república federal de todos estos tomboleros que nos tocaron en suerte.
Ya saben que la socialista que tengo agazapada en la conciencia no se acaba de resignar a que toa la historia del PSOE de la última década la escriba Pedro Sánchez.
Los que no estarán tan contentos serán los catalanes que votaron masivamente al PSOE y al PP e igual tienen que preparar el macutu pa emigrar a Perpiñán, que es la ciudad donde todos tienen primos.
Ya saben que la socialista que tengo agazapada en la conciencia no se acaba de resignar a que toa la historia del PSOE de la última década la escriba Pedro Sánchez. Es un paisano que mi recuerda les romeríes de pueblu de mis años mozos, cuando veías llegar a un guaperas en vaqueros y perdías hasta el andar pero que, en cuantu te sacaba a bailar, acababati con los pies y encima no decía mas que fataes y estabas deseando que acabara la pieza pa que y diera el turre a otra, y eso dígolo yo que nunca tuvi muchu pedido ni necesidad de espantar los mozos, pero a esti no lu quería yo ni aunque mi tiraran con él detrás los calcañares como decía Delmira la de Vixili, que en paz descanse.
Vamos que paecer no mi paez gran cosa. La izquierda y la derecha tradicional andan secuestraes por franquistas y abertzales, vaya panorama. Y lo peor que nos acecha es que la economía alemana no va bien, y como no va bien vendrán menos a beber cerveza y, además, en cuantu yos falta liquidez empiezan a mirar al sur con ojeriza, como se mira a los parientes que llegan a gorronear a la hora de comer. Como nos corten el grifo vamos o vais a pasar un inviernu de lo más crudu que, aunque aquí el presidente vacile diciendo que media Europa nos envidia, les puedo asegurar que Europa mira a España con recelu, que no basta con prohibir los toros y poner banderes multicolores pa paecer que somos de fiar, al contrariu más que un gobiernu, Pedrín y sus socios paecen una comisión de festejos, que lo echan tou en cohetes.
En fin, que sí, que yo voy a andar como los comunistas de toda la vida de Dios, pidiendo una federación, si es la única manera de que nos quitemos de encima esta camándula… Eso sí, antes habrá que ir a Suiza a hacer un cursillo aceleráu de cómo se gobierna un país llenu de cantones sin apaños ni corralitos.
