Josefina Simón localiza parientes de emigrados
Josefina Simón del Dago viajó hace unos años a Argentina para conocer a la única hermana de su padre, que había emigrado hace décadas, «ella y mi padre eran los únicos hermanos, tenía muchas ganas de conocerla porque aquí, por parte de mi padre yo no tengo más familia». El viaje en avión le ocasionó un problema en un oído y su familia argentina la llevó a la consulta de una otorrino, la doctora Mónica Villabrille. Aquella consulta desencadenó que ahora esta canguesa, de 62 años, se haya convertido en una reputada localizadora de parientes para los emigrados: «Aquella doctora me dijo que su familia descendía de Asturias, pero que no conocía a nadie aquí y que le gustaría contactar con sus parientes de aquí» Y así empezó todo, Josefina fue tirando del hilo y localizó a los parientes de la otorrino que viajó a España a conocerlos y «hasta se quedó en mi casa», recuerda.
Desde aquel, que fue el primero de sus casos, Josefina ya ha resuelto un buen número de ellos, la mayoría de descendientes de emigrados a Argentina y Cuba.
El foro de la página web Pueblos de España es “la oficina” de esta canguesa que ha descubierto una pasión con esto de intentar vincular a familias que llevan años sin saber unos de otros, y hasta siquiera de la existencia de muchos de ellos. En ese foro le dejan mensajes con las pistas a seguir, «unas veces los de allá tiene muchos datos, pero otras saben que son de Asturias y poco más». Aunque ella no se circunscribe a Asturias, también ha encontrado algún pariente en la vecina Galicia, «allí cuesta más trabajo, llamo por teléfono y son muy desconfiados, piensan que les quiero vender algo», comenta con una sonrisa. Otro de los casos que trae entre manos es de descendientes argentinos que podrían tener su origen en Andalucía, «por lo que cuentan y lo que he podido indagar, todo apunta a que un Domecq podría haber tenido una hija con una de las sirvientas, que se llegó a bautizar en una bodega, y que después madre e hija emigraron a Argentina; ahora una nieta de aquella supuesta hija no reconocida busca a sus ancestros. Hay historias que parecen de auténtica película»…
Sus herramientas de trabajo son internet y el teléfono «con esto de la tarifa plana de las llamadas busco los números por apellidos y llamo hasta que consigo atar los cabos, y por teléfono no son pocas las veces que doy con pistas fiables». Los archivos civiles y los diocesanos son los otros caladeros de información con los que contacta, «los de la iglesia son muy pejigueros y nada colaboradores, lo primero que te piden son los 15 euros por cualquier documento». ¿Anécdotas?, un montón, como la llamada a la oficina de Correos de Guantánamo (Cuba) para intentar localizar un certificado extraviado que envió a un emigrante, «ya había cursado una reclamación en la Oficina de Correos de Cangas y como no se resolvía nada decidí llamar directamente a la oficina de Correos de Guantánamo, me atendieron de maravilla, pero tuve que enviar el certificado de nuevo, que esta vez si llegó».
Búsquedas
Ahora tiene entre manos la búsqueda de parientes de: Manuel Alonso Remis, de Infiesto; Amalia Alonso o Amalia Temprana, que emigró a México entre 1840 y 1860; Félix Ambrosio Álvarez, que nació a finales de 1800 y emigró a Argentina; Manuel Iglesias Noriega, que emigró a México y su hermanos eran Covadonga, Amelia, Francisco y Favila; Amparo Kramel Pimentel, que nació en 1870, nieta de José Antonio Villaverde; Jorge Prieto Concha; Manuel Cueto Labra, de Las Rozas, hijo de Antonio del Cueto Pandiello, de Collía; Jose Areces Fernández que podría haber nacido entre 1870-1880 en Cangas de Onís y después emigró a Cuba. Si alguien repara en alguno de estos nombres o puede dar alguna pista puede contactar con Josefina en el teléfono 684 622 151.
