"Efectivos de Bomberos y la Unidad Canina del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) han concluido las labores de rastreo en el argayo que cortó la N-634, en el pk 347, entre Arobes y Soto de Dueñas, en Parres, y han podido comprobar que en el desprendimiento de tierra no quedó atrapado ningún vehículo", comunicaban desde el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias a las 3.33 de la madrugada.
El enorme desprendimiento que cortó la carretera Nacional 634 y la vía del ferrocarril se saldó con un tremendo susto para el conductor y legeros daños en el vehículo que se empotró contra la montaña de piedras, tierra y vegetación. Ésta persona fue quien daba la voz de alarma, tras lo que se movilizaron los diferentes efectivos que trabajaron hasta bien entrada la madrugada para despejar la vía y comprobar que no había ninguna persona, ni vehículos atrapados bajo el argayu.
El equipo de la Unidad Canina de Rescate del SEPA reconoció toda la zona y tras confirmar que no había víctimas retiraron del lugar a la 1 de la madrugada del domingo.