Rozalén ha recibido esta tarde el Galardón por la Igualdad que entrega Izquierda Unida de Llanera a mujeres que destacan ya sea por empoderar el papel femenino en la sociedad o por defenderlo.
La entrega del galardón ha estado acompañada de una charla en la que la artista ha compartido en el salón de actos del Instituto de Secundaria de Llanera, en Posada, lleno de asistentes, sus impresiones y su forma de entender la música. «En la música que siempre me ha gustado, desde niña, había siempre un compromiso social», declaraba, «siempre he valorado mucho que los artistas se mojen en muchas cosas pero entiendo que, en los tiempos hostiles que vivimos, haya gente que no quiera mojarse y llevar su carrera profesional de otra manera».
Para la artista, su música es una mezcla de todas sus «vocaciones mezcladas». «Yo vengo de la psicología social, estudié para ser psicóloga, luego musicoterapia», contaba en el encuentro, «he acabado de titiritera, a mucha honra». Algo que marca de forma inherente su manera de entender su música, que tiene mucho de historias familiares y vivencias personales.
«Estamos muy acostumbradas a escuchar canciones hechas por hombres», proseguía, «y me dicen que hago canciones para mujeres y no: yo hago canciones, cuento mi vida y soy mujer». Una forma de comprender que entre su discografía se encuentren temas vitales como "Vivir", un homenaje a las mujeres que están pasando cáncer de mama; "La historia de Justo" sobre la memoria democrática, que no deja de ser una historia familiar; o "La puerta violeta", relacionada con la violencia contra la mujer física o emocional.
