CCOO convoca la huelga de los trabajadores de Catering 45 del ERA de Arriondas

Este parón de actividad afectará a la cocina y el servicio de cafetería
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photo_camera Foto de archivo

Tras meses de desacuerdos, dimes y diretes Comisiones Obreras (CCOO) ha convocado una huelga de los trabajadores de Catering 45 que desempeñan su labor en la residencia del ERA de Arriondas. El citado paro será desde la medianoche del 26 de octubre hasta la medianoche del 28; y es fruto de meses de desencuentros entre la plantilla, la citada empresa y el ERA. 

Según la documentación registrada por CCOO para solicitar legalmente este paro, la huelga se respalda en el resultado «infructuoso de los requerimientos para que la empresa renuncie a la adopción de medidas injustificadas y que atentan contra los derechos de los trabajadores». Unas que se materializan, como también reclama el documento de registro de CCOO, en la deuda contraída con los trabajadores que siguen sin percibir sus salarios mensuales además de la paga extraordinaria. 

La convocatoria de huelga de los trabajadores de Categing 45 también apunta directamente a la Consejería de Derechos Sociales y Bienestar, de la que depende el servicio y a la que acusan de «nula actuación» desde que este conflicto comenzó meses atrás. CCOO demanda a este órgano del Gobierno de Asturias, además, que rescinda el contrato «por incumplimientos graves como así lo indica el propio contrato». 

Los residentes, los grandes damnificados de la gestión de la cocina de la residencia del ERA de Arriondas

De forma paralela, las quejas sobre la calidad del servicio de cocina del C.P.R. Arriondas continúan siendo una realidad. EL FIELATO ha podido saber, a través de algunos de sus residentes, no solo que los menús no se ajustan a la realidad sino que, además, la dieta que se les ofrece es «incomible». «Pone que toca cordero y hay pollo, pero el problema añadido es que no hay quien lo entre», aseguraba un varón que reside en este centro, «se ve que no tienen con qué cocinar».

Así las cosas, la huelga de finales de octubre podría comprometer todavía más el servicio de cocina ya que el personal que se ocupa de ella ya es en sí mismo una plantilla pequeña, con un buen número de trabajadores de baja cuyas plazas no han sido cubiertas.