Se trata de un préstamo de la familia astur-mexicana García Rivero

"La primera victoria" del pintor Ferrer-Dalmau ya está expuesta en la Casa Riera de Cangas de Onís

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photo_camera Yeyo Balbás, Augusto Ferrer-Dalmau, José Manuel González Castro y José Antonio García tras descubrir "La primera batalla".

«Cangas de Onís es el lugar más idóneo para exponer esta obra», aseguró hoy el alcalde cangués, José Manuel González Castro, durante la presentación del cuadro La primera victoria, obra del pintor Augusto Ferrer-Dalmau, que desde hoy sábado se puede visitar en la el Centro de Recepción de Visitantes “Casa Riera” de Cangas de Onís.

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Ferrer-Dalamau, González Castro, Jose Antonio García y Yeyo Balbás.

El cuadro –2 metros de alto, por 1,80 de ancho–, que fue un encargo de la familia astur-mexicana García Rivero, refleja la primera batalla y victoria de Don Pelayo frente a los invasores musulmanes, «una batalla a la que se ha dado la importancia que tuvo, después, de forma retrospectiva, cuando fue avanzando la expansión de la Reconquista», aseguró Iván Vélez arquitecto e investigador asociado de la Fundación Gustavo Bueno, que fue uno de los que intervino en la presentación hoy del cuadro en Cangas de Onís; un acto que contó también con la participación del cangués afincado en México, Javier Puente García, reconocido por la revista Forbes México entre los principales emprendedores en aquel país; así como con el asesor histórico del pintor, Yeyo Balbás, «sin él este cuadro hubiese sido imposible de pintar», aseguró Ferrer-Dalmáu en su intervención antes de descubrir el cuadro expuesto en una de las salas de la Casa Riera.

El alcalde cangués, agradeció a la familia García Rivero el empeño de traer a Cangas de Onís esta obra, en forma de préstamo, ahora durante un periodo de al menos diez años.

Augusto Ferrer-Dalmau, al que se conoce como “el pintor de batallas”, calificó su cuadro como «lo más real de lo que pudo ser aquello en aquella época», y confesó que sigue sorprendiendose de que «hayan pasado 1.300 años (desde aquella batalla) para tener un cuadro como éste».

La presentación de la emblemática tuvo lugar en un acto que dirigió la periodista local, María Villoria y en el que puso la asturianía el gaitero Óscar Fernández.

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Iván Vélez durante su intervención en el acto de la Casa Riera.
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Alcalde y pintor llegando a la Casa Riera.

 

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Ferrer-Dalmáu confesó que su amigo Pérez Reverte «me dijo que pusiese algún muerto cristiano, para evitar suspicacias».
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Javier Puente García.

 

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Yeyo Balbás, asesor histórico del pintor para esta obra, ataviado como iban aquellos cristianos a los que mandaba Don Pelayo.