«Quiero expresar, ante todo, nuestro agradecimiento por la oportunidad que nos dais, para hacer la lectura del pregón de las fiestas de esta hermosa villa que siempre nos ha acogido y respetado». Así comenzaba Aída Fernández-Paino, directora de Adepas, su pregón en la noche de ayer, que marcaba el inicio oficial de las fiestas del Ecce Homo de Noreña. Debido a las malas condiciones meteorológicas, el acto, que en un principio iba a celebrarse en los Jardines del Ayuntamiento, tuvo que ser trasladado en el último momento a la Casa de Cultura de la villa. Aún así, la sala acogió a más de un centenar de personas que se congregaron a las puertas de la Casa de Cultura para escuchar las palabra de Fernández-Paino.
Al acto acudieron la alcaldesa de Noreña, Amparo Antuña; la presidenta de Sonofe y concejala de Festejos, María Luisa Fonseca; y la Consejera de Salud del Principado, Concepción Saavedra.
El discurso estuvo marcado por multitud de referencias a la fundación Adepas, a la inclusión y a cómo el pueblo de Noreña les había acogido desde sus inicios, hace ya casi 60 años. «Aquí hemos forjado una vida llena de cultura, historia, vecindad... Una villa en la que los valores, tradiciones y creencias han ido incorporándose a cada uno de nosotros». Y es que hay una cosa que los chicos de Adepas tienen claro: «Somos parte de la villa, como lo son las chacineras, los zapateros, el Condal de fútbol...»
Adepas lleva en su día a día un compromiso estricto por la defensa de los derechos de todas las personas con discapacidad intelectual y, por ello, la directora de la fundación quiso expresar su deseo de «seguir trabajando en la comunidad de la villa, que nos aporta valores, calidad de vida y un ejemplo admirable de convivencia inclusiva», añadió la directora de la fundación».
Asímismo, Aída Fernández-Paino quiso recordar que aún queda un largo recorrido. «Otros 60 años más al menos para seguir demostrando que, desde programas y actividades futuras, las personas con discapacidad son parte de la sociedad y tienen mucho que aportar», concluyó.
Durante el acto, las reinas del año pasado cedieron el "trono" a las nuevas representantes del Ecce Homo, Mara Blanco y Nerea Llorián, que, entre tímidas y nerviosas, aseguraron que «es un honor ostentar esta responsabilidad en unas fiestas tan importantes para nosotras».
