El concejal de obras y servicios del ayuntamiento de Noreña, Pelayo Suárez, presentó en la tarde noche de ayer su dimisión como edil del consistorio de la Villa tras la distribución anónima de una supuesta factura telefónica en la que se muestran llamadas realizadas desde su teléfono móvil del ayuntamiento a números de citas.
La teniente de alcalde de ayuntamiento de Noreña, Ana González, confirmó la dimisión del edil, así como la apertura de una investigación interna para aclarar el asunto. La supuesta factura, a la que ha tenido acceso este periódico, muestra más de quince llamadas realizadas desde el número de teléfono móvil del concejal a números de servicios de citas en Asturias y otras comunidades.
La alcaldesa, Amparo Antuña, declaró que «en relación a estos hechos conocidos a través de los medios de comunicación por los que, supuestamente, se le achacan a Pelayo Suárez ese tipo de llamadas desde su teléfono de la corporación, queremos dejar claro que desde este ayuntamiento se van a estudiar los mecanismos jurídicos que tengamos a nuestra disposición para que se adopten las medidas oportunas y así depurar responsabilidades internas. Queremos recordar también que todo el mundo tiene derecho a la presunción de inocencia. También, quero decir que fue el propio concejal el que presentó su dimisión una vez conoció los hechos».
Desde el equipo de gobierno del ayuntamiento ya se está trabajando en la búsqueda del sustituto de Pelayo Suárez y ya se han establecido los contactos con el siguiente miembro de la lista de IPÑ.
«Rogamos la máxima transparencia en las investigaciones»
La Agrupación municipal socialista de Noreña ha emitido un comunicado de prensa a raíz de los últimos sucesos acaecidos en el consistorio. Su Secretario general y portavoz en el ayuntamiento, Manuel Riera, asegura en su escrito que « como Agrupación Municipal y Grupo Municipal Socialista en la oposición en el ayuntamiento de Noreña, queremos conocer todo el entramado y hechos que puedan existir detrás de estos asuntos». De la misma manera, solicita « la máxima transparencia en las investigaciones anunciadas. Que estas tomen el tiempo necesario pero que este no se prolongue “sine die” y sin visibilidad de fecha fin, permitiendo el esclarecimiento de los hechos y donde se establezcan las conclusiones que permitan temporizar y poner claridad en todo este entramado, junto con la depuración de responsabilidades políticas que pudieran derivarse, e independientes de las legales a las que pudiere dar lugar».
