La Fundación tiene abierta una nueva convocatoria de becas a estudiantes universitarios y de FP

Eva Pando, directora de la Fundación de Caja Rural de Asturias: «Queremos volver a darle vida al territorio, procurar que vuelvan a suceder cosas en el medio rural»

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photo_camera Eva Pando.

Eva Pando lleva poco más de un año al frente de la Fundación de la Caja Rural de Asturias. Esta ingeniera industrial, nacida en Moreda de Aller, comenzó su andanza profesional en la empresa Nadar SL, una start up del sector médico radicada en Langreo: «Enseguida me di cuenta de que me gustaba más la parte de negocio, un perfil más comercial que implicaba más el trato con las personas y que dejaba en un segundo plano el trabajo más técnico».

Un anuncio en la Escuela de ingenieros solicitando un perfil junior para la Sociedad Regional de Promoción del Principado (SRP) que se encargara de la realización de un análisis técnico industrial de los proyectos de inversión que se realizaban en Asturias propicia su ingreso en esta institución público-privada, allá por el año 1997.

Hay que hacer ver que, para que haya gente en el medio rural,  tiene que haber actividad económica, hay que facilitarle la vida a la gente»

A partir de ahí, en 2005, directora del Centro Europeo de Empresas e Innovación del Principado de Asturias (CEEI), cargo que ostentó hasta septiembre de 2015 en el que fue nombrada directora del Instituto de Desarrollo Económico del Principado de Asturias (IDEPA): «hace 20 años, hablar de start up tecnológicas, era poco menos que ciencia ficción. En aquella época pusimos en marcha todo lo que eran sus mecanismos de apoyo a nivel regional. Más tarde, ya al frente del IDEPA contribuimos a que ese pequeño tejido de PYMES que ya se estaba consolidando en Asturias se adentrara en la innovación y la internacionalización».

Tras ocho años y medio al frente del IDEPA, y coincidiendo con su transformación en la nueva Agencia de Ciencia, Competitividad Empresarial e Innovación Asturiana (Sekuens), Eva Pando atiende la propuesta de dirigir la Fundación de la Caja Rural y poner a su servicio todo lo aprendido: «el CEEI y el IDEPA fueron unos grandes miradores que me permitieron conocer de primera mano los proyectos empresariales; vimos nacer y crecer empresas, otras tantas que cerraron: vives en primera persona las dificultades para encontrar talento, para poder llevar a cabo esa innovación que tanto se pregona o para conseguir la internacionalización, ves las dificultades que supone tener un tejido empresarial tan atomizado… fue una experiencia muy potente a todos los niveles. Yo siempre tuve el gusanillo de trabajar en el sector privado y, cuando me llegó la oportunidad de poder pasar a formar parte de esta institución, no tuve ninguna duda».

Tras un análisis de la demanda o de los perfiles de los  destinatarios, hemos llevado a cabo una renovación que amplía el abanico de los beneficiarios»

Tras un año al frente de la Fundación de Caja Rural de Asturias, Eva Pando y su equipo han empleado gran parte de su esfuerzo en buscar identificar y darles un rumbo nuevo a los objetivos: «la Fundación era el conducto por el que se canalizaban muchas ayudas, tanto de carácter social como cultural, que desde la Caja Rural se dan al territorio. Debido al enorme crecimiento que estamos experimentando se ha decidido dotar a la Fundación con un equipo propio de trabajo que consiga darle más alcance a nuestra labor».

Con ello, la Fundación Caja Rural de Asturias aborda una nueva etapa que tiene como propósito dar vida al territorio para el desarrollo económico y social de la región: «La Caja Rural está muy capilarizada. Contamos con 115 oficinas en toda Asturias y, contra la tendencia general, continuamos abriéndolas, no solo en terreno urbano, sino que también en zonas rurales, como las que abrimos en Pola de Somiedo y Cabrales el año pasado. Con su apertura no se busca una rentabilidad sino un compromiso con el territorio total y absoluto. Cuando paseas por esos pueblos te das cuenta que hay una nueva ruralidad, gente que vive en los pueblos y que no trabaja en el sector primario, como, por ejemplo, en el caso del Oriente en el que el turismo está entrando con fuerza. Ese medio rural tiene una dificultad de estacionalidad y de vivienda ya que, si quieres ir a vivir allí, los alquileres están muy orientados a vivienda vacacional. Este es uno de los temas que nos gustaría abordar desde la Fundación, porque es un gran problema. Hay que hacer ver que, para que haya gente en el medio rural, tiene que haber actividad económica, hay que facilitarle la vida a la gente».

Para ello, la Fundación se apoya en cuatro ejes estratégicos que le sirven de hoja de ruta en sus actividades. El primero es la sostenibilidad, tanto medioambiental como demográfica, facilitando la vida en el territorio, cuidando el capital natural y su gente. El segundo es la innovación y talento, considerándolos como palancas de riqueza. El tercer eje de actividad es la ciencia, apostando por la investigación y la divulgación que mejoran la calidad de vida de las personas. Por último, apuestan por la inversión de impacto en proyectos que tengan propósito social y medioambiental.

Becas de la Fundación Caja Rural de Asturias

Una de las actividades que la Fundación lleva realizando durante años es la concesión de becas a estudiantes universitarios: «Tras un análisis de la demanda o de los perfiles de los destinatarios, hemos llevado a cabo una renovación que amplía el abanico de los beneficiarios. Con ello, este año salimos con 150 becas. Mantenemos 100 becas de 1 000 euros, cada una de ellas para universitarios, pero abrimos un nuevo campo por el que becaremos a estudiantes de Formación Profesional y de los llamados Estudios Equivalentes, como las enseñanzas artísticas, con 40 becas, del mismo importe. Y las 10 becas que faltan serán para premiar a esos estudiantes que quieren hacer un máster pero que tienen que salir de Asturias para cursarlo. ocho becas de 5000 euros cada una para estudios en territorio nacional y dos de 10000 euros si el estudiante tiene que salir al extranjero para cursarlo. Los 150 mejores expedientes serán receptores de esas becas. A parte de expediente, esos 10 elegidos para la beca del máster, deberán presentarnos una memoria y un vídeo motivacional en el que nos expliquen el por qué sería importante para ellos acceder a ese máster y a estas ayudas».

El periodo de admisión de solicitudes comenzó el 1 de septiembre de 2024 y finalizará el 15 de octubre de 2024.

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