La problemática de las garrapatas en Asturias: por qué son tan peligrosas

Las condiciones climáticas y la existencia de grandes superficies forestales provocan una mayor presencia de estos parásitos en la comunidad asturiana
Garrapata.
Medicina Interna Deux
photo_camera Garrapata. Medicina Interna Deux

Seguro que no es la primera vez que escuchas a alguien decir que tras una escapada al monte o una ruta por la naturaleza, ha sufrido las picaduras de las garrapatas. Asturias se trata, según el Ministerio de Salud del Gobierno de España, el Instituto de Salud Carlos III y otras instituciones médicas de gran prestigio, una zona endémica de garrapatas. Una de las principales problemáticas que surgen a raíz de estos arácnidos parásitos es, precisamente, la transmisión de enfermedades e infecciones que pueden suponer un grave peligro para la persona que las contrae. 

Las afecciones más comunes transmitidas por las garrapatas se tratan de la enfermedad de Lyme o la babesiosis. Dos infecciones con sintomatologías similares que incluyen sarpullidos en la piel, fiebre, dolor de cabeza y en los casos más graves puede extenderse al sistema nervioso, articulación y órganos importantes como el corazón, los riñones o los pulmones.

Respecto a estas dos infecciones, tanto el Ministerio de Sanidad como el Instituto de Salud Carlos III situaron las comunidades autónomas de Galicia y Asturias como las zonas del ámbito nacional con mayor presencia de estas patologías. Con relación a la babesiosis, las anteriores instituciones aseguran que es una infección transmitida por un parásito que tiene grandes similitudes con la malaria.

El peligro de las garrapatas en Asturias

En términos numéricos, cabe reseñar que en Asturias la posibilidad de contagiarse de la babesiosis es de más de 7 personas por 100.000 habitantes; una cifra que supera la media de otros países. Por otro lado, la incidencia de la enfermedad de Lyme se triplicó en el Principado durante los últimos 15 años.

Si bien es cierto que tanto la enfermedad de Lyme como la de babesiosis son más comunes en Asturias, otras infecciones transmitidas por la garrapata como la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo tienen mayor presencia en comunidades como Extremadura y provincias como Salamanca. Una enfermedad que aunque no es muy frecuente, puede llegar a suponer un problema muy grave para la salud de los afectados, según asegura la jefa de área del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias.

Garrapata.
Animal´s Health
Garrapata. Animal´s Health

A pesar de esto, desde la Coordinadora se explica que para que la transmisión de esta enfermedad, considerada como emergente (la primera vez que se tuvo constancia de esta afección en España fue en 2010), se produzca, tiene que haber una serie de condiciones ambientales específicas. Por ello, alertan que el contagio no es tan sencillo.

¿Por qué Asturias es una de las regiones con mayor presencia de garrapatas de España? Pues bien, el Instituto de Salud Carlos III expone que uno de los motivos radica en que la comunidad asturiana es una zona en la que “hay grandes superficies forestales”. Otro de las razones del aumento de garrapatas en Asturias y por ende, de infecciones provocadas por la picadura de este parásito es el calentamiento global y es que según los expertos, esta situación de gravedad climática ocasiona que estos animales estén presentes durante más tiempo en las zonas donde ya eran habituales anteriormente, extendiéndose, a su vez, a más lugares.

Además, las condiciones de humedad, clima y temperatura de Asturias parecen propiciar, en mayor medida, la presencia de garrapatas. En concreto, un estudio estadístico llevado a cabo por el Grupo de Investigación en Sanidad y Biotecnología (SaBio) de la Universidad de Castilla-La Mancha situaron la Sierra del Sueve (situada en los concejos de Piloña, Colunga, Caravia, Parres y Ribadesella) como una de las zonas con mayor número de estos parásitos. Para este estudio, se recogieron más de 70.000 muestras de garrapata (en sus tres estados de larva, ninfa y adulto).

La disponibilidad de animales grandes donde hospedarse y la temperatura del suelo son otros dos factores importantes en el desarrollo y la mayor presencia de estos animales. Curiosamente, Asturias cumple con estos requisitos propicios para la proliferación de estos parásitos, En cuanto a las poblaciones con mayor riesgo de exposición a las infecciones provocadas por la picadura de la garrapata, este mismo estudio menciona a los cazadores, senderistas y ciclistas, pero se resalta que cualquier persona puede ser susceptible de contagiarse.

La época del año es otro de los factores que influyen en el número de contagios. De esta manera, es más habitual que la transmisión de patologías por picaduras de estos parásitos en su forma adulta sea menor en verano, mientras que en el caso de las larvas, precisamente son estos meses de mayor calor cuando más actividad tienen. La primavera, sin embargo, es la estación con mayor presencia de infecciones provocadas por garrapatas adultas y ninfas. Los meses de invierno también son propicios para estos parásitos en su etapa de ninfa.

Qué precauciones podemos tomar

En definitiva, son muchos los aspectos que influyen en que Asturias sea una de las zonas endémicas por excelencia de presencia de garrapatas a nivel español. Por eso, es necesario subrayar la importancia de adoptar una serie de precauciones en caso de que se vaya a hacer cualquier actividad en el entorno rural, campestre o de montaña. Estas medidas, recomendadas por el Hospital Universitario La Paz, incluyen vestir prendas con mangas y perneras largas, utilizar botas o zapato cerrado con calcetines, llevar ropa de colores claros (principalmente en la zona de abajo) para visualizar las garrapatas que pudieran adherirse y en caso de ir acompañados de animales domésticos, protegerlos con repelentes especiales.